RAMONES

Una de mis bandas favoritas (y de un chingo de gente más) son los RAMONES, cosa que he manifestado antes en este blog -que también es su blog, nomás no abuse-, hoy tengo ganas de escribir al respecto.

Curiosamente lo primero que conocí de ellos fue la imagen, cuando era un niño ignorante con nula idea del mundo empecé a notar que en la colonia donde vivía había algunos tipos con el cabello largo que cubría los ojos (hecho que me inquietaba porque no estaba seguro si podían ver bien), llevaban además chamarras de piel sin importar el sol, pantalones entubados, y lo mejor eran los tenis sucios, rotos que parecían gritar que valía madres todo (charcos, piedras, opiniones, limpieza, etc). 

Pasó el tiempo y me enteré que dicha imagen estaba inspirada en una banda, conocí su música y todo parecía tener sentido: melodías simples y rápidas, pesar enmarcado por notas sencillas, letras honestas, hartazgo, fuerza, aliento y desaliento, inocencia agredida y perdida,  soledad, depresión, falta de pretensión, querer o no querer algo (crecer, novia, pelear, sedarse y escapar, vivir esta vida, etc). 

La mayoría de las canciones duran alrededor de dos minutos, que me parece absolutamente encantador porque la disfrutas al máximo, quieres seguir y te das cuenta que todo lo bueno termina rápido, justo como pasa en la vida. 

Es por eso que me gustan tanto los RAMONES.